De todas formas, en la fase final hemos dado un baño a todas las selecciones. Vale que hemos tenido muchísima suerte con nuestro cuadro y con la "desgraciada" derrota ante Croacia, que fue la que nos colocó ahí, pero... quitando el partido de Croacia, nos hemos merendado a todos los equipos sin arbitrajes caseros, típico de los países nórdicos (y del Barcelona en todas sus secciones).